El pasado domingo 9 de febrero será recordado por mucha gente, pero sobre todo por Julene como una de sus mejores competiciones hasta el día de hoy.
Julene Bouzo Agirregomezkorta consiguio por fin el tan ansiado metal, un oro que pone la guinda al pastel, a unas semanas de dura preparación tanto físicamente como mentalmente, y que gracias a su madurez y a su gran capacidad para sacar el máximo rendimiento en una gran competición, realizó el concurso de sus sueños.
Julene acudía a este campeonato con los deberes hechos. Las semanas previas había entrenado muy bien, con una gran mejoría en su fuerza de salto y un toque de calidad en su ejecución. Todo ello le hacía acudir con seguridad y tranquilidad para hacer en la pista lo que tantos días ha entrenado en el polideportivo.
Su concurso fue impecable, todas las alturas al primer intento, pasándolas con soltura y elegancia, lo que hacía pensar que el oro era una posible opción. El 1.72 y el 1.74 fueron grandes saltos con margen de mejora y, al poner el 1.76, Julene supo que estaba ante su mejor marca de siempre. Y si la pasaba a la primera, con muchas opciones del oro.
Así fue, afrontó el listón con decisión y.... ¡bravo! salto a la primera. Se colocaba líder del concurso y acababa de mejorar marca. Cuando su rival mas directa, Laura, no lo pudo pasar, Julene fue todo un manojo de nervios. Sus ilusiones y sueños se acababan de cumplir.
El 1.78 fue un quiero y no puedo, pero más por su situación emocional que por la física, porque el primer intento fue muy bueno, y con sensaciones de que esa será la marca a conseguir en poco tiempo.
No tengo palabras para decir o expresar lo vivido, cada salto era una celebración, era una mirada cómplice entre los dos, y era una pequeña charla para, sobre todo, quitar los nervios. Gracias Julene por hacerme tan feliz, un entrenador no puede estar más contento, no solo por la medalla, sino por tu saber estar en la pista y en los entrenamientos.
Espero que esto no sea más que una pequeña mota de polvo dentro del futuro que te espera, y que disfrutes de todas estas sensaciones y vivencias que el deporte te está regalando.
Zorionak y a seguir entrenando.